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 Visita obligada para los amantes del rock

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   Son las diez de la noche y nos encontramos en la calle San Francisco, en pleno casco viejo de la ciudad. A lo lejos vemos dos grupos de amigos que conversan mientras se toman una cerveza. “Será allí” pensamos. Y efectivamente. Una cristalera grande desde donde se ve el interior del local y unas letras en las que pone “Txintxarri”. Al principio dudamos un poco. Desde la calle se escucha “If you wanna be my lover” de las Space Girls. ¿Pero no era un local de rock? Nos miramos riéndonos a carcajadas.

 

   Decidimos entrar y esperar un rato hasta que comienza a sonar rock. Ya estamos más relajados. Conversamos con la gente que está disfrutando de un buen rato, cuya media de edad estará en torno a los 30 años. Jóvenes (y otros no tanto) llenos de vitalidad que alzan sus brazos con energía y mueven la cabeza al puro estilo rockero. Algunos de ellos nos comentan que son clientes habituales del local, que es un bar pequeño, pero muy acogedor en el que disfrutan como niños.

 

   Nos acercamos a la barra donde nos atiende un chico pelirrojo, Fer, muy simpático. Pedimos una cerveza y conversamos con él sobre el establecimiento. Se trata de un local nocturno, donde pinchan música indie, pop y sobre todo, rock. Además, ofrecen algunos conciertos de grupos musicales o DJ’s. Nos comenta que a la gente se le ve encantada y que su éxito como un sitio alternativo de Pamplona se debe a la clientela que les visita cada fin de semana.

 

   Es un lugar que merece la pena conocer, aunque solo sea para estar un ratito y tomar algo. No obstante, si sois de los que os gusta el rock y disfrutáis con los conciertos, es una visita obligada. Sacamos algunas fotos, aunque el local está oscuro y no se ven muy bien.

 

   Salimos de allí hacia las once, ya es tarde y hemos cumplido con el trabajo de hoy. Mientras nos dirigimos a nuestras respectivas casas reflexionamos sobre el lugar. No se puede juzgar sin haber probado. Por fuera parece oscuro y pequeño, pero al entrar se ve la alegría de todos los que están bailando sin parar y la felicidad de los trabajadores (tanto camareros como DJ`s) al ver que la gente está disfrutando de la noche al máximo.

 

   ¿Qué más se le puede pedir a un bar?